El cáncer de mama es un tumor que se origina en el tejido de la glándula mamaria que está formada por los lobulillos o glándulas productoras de leche, los conductos galactóforos o tubos que conducen la leche desde los lobulillos al pezón, y tejido adiposo y conectivo que rodea los conductos y los lobulillos, los vasos sanguíneos y los vasos linfáticos.

Podemos diferenciar inicialmente entre los siguientes tipos de cáncer de mama en función del lugar donde se desarrolle y la extensión del mismo:

  • Carcinoma ductal in situ o carcinoma intraductal: las células cancerosas están dentro de los conductos y no se han propagado hacia otros tejidos mamarios
  • Carcinoma lobulillar in situ: este tipo de carcinoma no es cáncer propiamente dicho, sino un marcador que nos indica del aumento del riesgo de cáncer invasivo en una o ambas mamas, derivado de un crecimiento celular anómalo en los lobulillos de las glándulas productoras de leche
  • Carcinoma ductal invasivo o infiltrante: las células cancerosas originadas en un conducto penetran a través de la pared del mismo e invaden otros tejidos mamarios
  • Carcinoma lobulillar invasivo o infiltrante: las células cancerosas se originan en los lobulillos mamarios y se propagan a otros tejidos

El cáncer de mama es más frecuente en mujeres que en hombres, quienes representan aproximadamente el 1% de los casos. Todas las personas pueden desarrollar este tipo de cáncer y dependerá de la edad, del historial médico familiar y personal y del estilo de vida, el tener un mayor o menor riesgo de tenerlo.